Te queremos hablar de los motivos por los que pasamos miedo y nos gusta. Muchos hogares decorados con elementos de miedo, las personas disfrazadas y la programación de TV se orienta a esos temas y los vemos.
Hay una razón y aquí lo comprenderás.
El miedo y el organismo
El miedo es una emoción humana con una clara finalidad biológica: huir o actuar positivamente ante el peligro, es decir, luchar contra una amenaza.
Esto a menudo se conoce como la respuesta de «lucha o huida». Esta respuesta de «lucha o huida» nos permite sobrevivir a situaciones que podrían poner en peligro nuestra vida.
El miedo surge porque hay un estímulo que entendemos como peligroso, lo que provoca una respuesta fisiológica en nuestro organismo en forma de latidos acelerados, sudoración y dificultad para respirar.
En casos más extremos, el miedo puede conducir a un pobre control de esfínteres e incluso a la pérdida del conocimiento. Hay una razón para esto: el miedo nos hace huir o luchar con la mayor eficacia posible.
En este caso, el cuerpo, ante los estímulos inducidos por el miedo, hace un buen trabajo acelerando el corazón y la respiración (para correr más rápido) y vaciando líquidos (relajando los músculos del esfínter y sudando, lo que nos hace correr). encendedor) Preparar. El desmayo inducido en los casos más extremos es una forma de “adormecernos” cuando el cuerpo es incapaz de resistir o huir de estímulos peligrosos.
Se cree que las regiones del cerebro involucradas en el miedo son activadas por estímulos peligrosos y provocan estos cambios fisiológicos. Entonces, cuando se pregunta qué se activa primero, el cerebro o el mecanismo fisiológico, la respuesta es que sucede simultáneamente a través de mecanismos de retroalimentación.
Varios neuroquímicos se han relacionado con sentimientos de miedo y cambios fisiológicos, pero los principales son la epinefrina, la norepinefrina y la dopamina. Estos tres neuroquímicos pertenecen a la familia de las catecolaminas (también conocidas como aminohormonas) y se sintetizan a través de la misma tirosina, por lo que su síntesis depende de la síntesis de otras sustancias.
¿Qué tiene que ver la neuroquímica del miedo con si nos gusta experimentarlo?
Bueno, mucho. Como ya se ha comentado, la síntesis de catecolaminas depende de las mismas aldabas y, por tanto, la fabricación de este tipo de neurotransmisores depende de la síntesis del resto de su familia.
Por tanto, la síntesis de dopamina está relacionada con la fabricación de norepinefrina y epinefrina, y viceversa.
La dopamina es un neurotransmisor directamente relacionado con las vías de recompensa, el placer y las conductas adictivas.
Ahora es el momento de hablar de dos conceptos clave que explican claramente por qué a algunas personas les gusta tener miedo: la adicción y el placer.
Equipo Psiquiatras Online