Los seres humanos somos especies sintientes y sufrientes, tenemos conocimiento de cosas que experimentamos sufrimiento y dolor.

El que reconozcamos las emociones y sentimientos en otros y compartirlos parece ser una emoción más propia de las personas, aunque hay estudios que dicen que todos los mamíferos la tienen en cierto modo.

¿Qué es la ecpatía?

La ecpatía es un nuevo concepto que puede complementar la empatía. A través de la telepatía, podemos crear límites entre nuestros propios sentimientos y los de los demás. En otras palabras, la empatía es la capacidad de dejar que no nos identifiquemos demasiado con el sufrimiento de los demás.

La empatía es la capacidad o función mental que nos permite considerar a los demás y percibir, comprender y compartir sus sentimientos.

Como sugiere su propia etimología, nos permite relacionarnos con otro «sentimiento interior», en lugar de «ek-patheia», que significa «sacar», lo que nos permite regular ver a alguien sufriendo puede producir un sentimiento de.

La importancia de la empatía radica en esta capacidad de regular, y definirla como lo contrario de la empatía es simplemente una conveniencia para su comprensión. Se puede tener empatía y empatía al mismo tiempo, que es más importante, es necesario. Como dijo Aristóteles, «La virtud está en el medio».

¿Cuál es la función de la ecpatía?

Esta es la función que tiene:

Empatía y manipulación

Existe un abanico de patologías, como el narcisismo, en las que tanto la manipulación directa como la indirecta son las armas básicas del hombre. A través de la culpa u otro tipo de emociones negativas, las personas narcisistas pueden someter a otros para su propio beneficio.

Cuando son criticados por algún comportamiento inapropiado o desagradable, pueden hacerlo presentándose a menudo como la víctima de la historia.

En este caso, la empatía juega un papel importante porque nos permite separarnos del “dolor de los demás” y ver las cosas como son y entender que es una manipulación. A menudo, los narcisistas buscan personas particularmente empáticas para la intimidad.

Como hemos visto, francamente, el hecho de identificarse con el dolor ajeno puede ser perjudicial en cierto tipo de relaciones.

Ecpatía y Empatía

Hemos mencionado los riesgos de la empatía varias veces a lo largo de este artículo y, en ocasiones, puede llevarnos a identificarnos demasiado con los sentimientos de los demás.

Esto puede llevar a dos comportamientos no saludables que pueden ocurrir al mismo tiempo, uno es olvidarse de cuidar al otro, y el segundo es afectar nuestra capacidad de responder adecuadamente a alguien que necesita cuidado o busca consuelo porque estamos emocionalmente afectados por el Evento Influencia y falta de previsión.

Además de comprender una realidad emocional diferente a la nuestra, también podemos mejorar nuestra empatía desarrollando otras estrategias, como conocernos a nosotros mismos y ser conscientes de nuestras limitaciones o debilidades, y lo más importante poder volver a nuestras emociones y dejar que la otra persona entiende, y solo entonces podemos ayudarlo mejor.

 

Equipo Psiquiatras Online

 

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