Muchas personas viven atrapadas en la lucha constante contra su ansiedad, intentando suprimirla, evitarla o anestesiarla. Pero rara vez se preguntan: ¿qué me está queriendo decir esta ansiedad? Lejos de ser solo un trastorno a eliminar, la ansiedad puede ser una forma de comunicación del cuerpo y la mente, una señal mal interpretada que, si se escucha con atención, tiene mucho que revelar.
Ansiedad no es debilidad, es información
La ansiedad no aparece de la nada. Es una reacción del sistema nervioso frente a algo que percibe como una amenaza, pero esa amenaza no siempre es externa. Muchas veces, la fuente está dentro: exigencias autoimpuestas, miedos que no se nombran, decisiones que se evitan, estilos de vida que van en contra de lo que realmente se desea.
En lugar de suprimir la ansiedad, es útil observarla. ¿Cuándo se activa? ¿Qué pensamiento la precede? ¿Qué emociones se esconden detrás? La ansiedad muchas veces acompaña el miedo a no ser suficiente, el desgaste por sostener relaciones o trabajos insatisfactorios, la desconexión emocional. No es casual. Es un código que puede ser traducido con ayuda profesional.
Escuchar la ansiedad para sanar desde la raíz
Cambiar la relación con la ansiedad no significa resignarse a vivir con ella, sino comenzar a entenderla. Quien aprende a escuchar su ansiedad con curiosidad y sin juicio puede descubrir claves esenciales sobre su historia, sus heridas y sus límites. Porque no se trata de eliminar un síntoma, sino de atender su origen.
En terapia trabajamos precisamente eso: construir un nuevo lenguaje para identificar lo que no ha sido dicho, transformar la angustia en conocimiento, y brindar herramientas prácticas para regular el sistema nervioso. A veces, la ansiedad es simplemente un mensaje urgente: “Algo necesita cambiar”.
Si estás cansado de luchar contra tu ansiedad, quizás sea momento de dejar de combatirla y empezar a comprenderla. Lo que hoy te agobia podría convertirse en tu mejor guía para sanar.
Equipo Psiquiatras Online